Incluso conociendo la calidad de la quinta entrega, no me esperaba un videojuego tan sólido en todos sus apartados, especialmente en el artístico y el sonoro, siendo ambos extremadamente únicos y excelentes, aún cuando considero que el final se siente solo abierto pero de una manera que es más incompleta que del tipo esperanzadora por como es presentada, me gusto mucho su historia de inicio a fin, especialmente la historia del primer emperador. Las batallas finales son horribles, los enemigos son nada menos que esponjas de recibir daño y en general sentí que la curva de dificultad estuvo completamente desbalanceada, siendo de inicio hasta casi el fin un paseo, pero los últimos combates suponiendo largas secciones de combates más bien tediosos, el hecho de solo poder mover la cámara de manera limitada y que cuando se mueve los personajes se detienen en algo molesto, más cuando algunas veces no se ve absolutamente nada. Lo sentí innecesariamente largo, con tramos que se podían quitar y volvían mucho más solida la experiencia y otros que se podían resumir con resultados similares. Aún con todos sus problemas es una grandísima obra y una experiencia grata y muy recomendable.