Una idea tan ambiciosa el combinar dos géneros tan únicos por si solos (plataformero + inmersive sim) que resulta en un juego casi irrepetible que lo demuestra su propia secuela. Mecánicas que no castigan al jugador ni cambian realmente la narrativa del juego (como un inmersive sim) pero con el suficiente encanto como para vivir la experiencia que hizo revivir a Oswald. Una pieza histórica muy extrañamente bonita.

Reviewed on May 18, 2024


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