Cuando el escape room se va de madre, no te fíes ni de tu sombra. Bromas aparte, le suelo tener manía a las obras que se centran en intentar hacerte sentir más listo de lo que eres para ganarte a través de tu ego subconsciente (pelis de Nolan, por ejemplo). Esta es de esas obras, pero el suspense es tan bueno que, de verdad, vale la pena