Debo admitir que jugué este título simplemente porque lo necesitaba. Estaba cansado de esos juegos largos, con inmensos mapas llenos de secretos y una duración de más de 20 horas. Necesitaba un descanso, dejar de pensar en todas esas misiones secundarias acumuladas y olvidar esos mapas llenos de íconos y cosas por hacer. Estaba abrumado y agotado, no quería seguir jugando y sabía que necesitaba cambiar el chip por un tiempo. Fue cuando de la nada, apareció Frog Detective en GamePass, el juego que me hizo recordar por qué me gusta tanto jugar. Frog Detective es un título simple y al grano, que nos cuenta la historia del segundo mejor detective del mundo mientras resolvemos los misterios más inverosímiles que nos podamos imaginar. Es un hermoso y sencillo juego que se basa en la exploración y combina las mecánicas de un point and click y un walking simulator, entregándonos los personajes más variopintos y auténticos que he visto en mucho tiempo. Habla con todo el que te encuentres, intercambia objetos, has favores y descubre al culpable para avanzar. Es un título muy carismático lleno de humor y mecánicas sencillas que se acaba demasiado rápido, y en esta ocasión, eso es algo muy bueno. Altamente recomendado para todos, al fin y al cabo, no es tan sencillo como parece.