Este es otro caso de esos que, sin ser un mal juego, se da eso de "tanto potencial desperdiciado", pero al mismo tiempo, es de esos juegos que en retrospectiva uno puede ver qué intentaron hacer respecto a dejar su adn en lo que vendría después.

Básicamente sin Fates y sin Warriors, no tendríamos Three Houses.

Reviewed on Aug 20, 2021


Comments