Rhythm heaven es quizás a mi visión personal el mejor juego de ritmo. Puedo decir que es una de las pocas experiencias que puedo volver a rejugar y sentir la diversión que me provocó la primera vez.
En este juego de ritmo tienes que que imitar patrones melódicos de una complejidad rítmica básica-intermedia. Todo esto acompañado de situaciones alocadas, como proteger una cita pateando pelotas, ser parte de una marcha de flamencos o ser un samurai que da espadazos a seres de ultratumba, etc.
Lo que me gusta de este juego y de la saga en general y lo puedo corroborar como estudiante de música es que la idea del ritmo no es un agregado como puede ser los juegos de guitar hero, osu, friday night funking, Miku, etc. En estos juegos la música es un agregado a un gameplay que se basa en apretar botones que "siguen" de alguna forma a la música. Creo genuinamente que aquí reside la fortaleza de este juego.
Aunque parezca que lo que hace Rhythm Heaven Fever es mucho más simple que los otros juegos debido a que solo apretas un botón o dos (depende del nivel), creo que lo mágico del título es que te obliga a internalizar los patrones rítmicos que presenta (explicándote los patrones detalladamente antes de cada nivel, cosa que se da en la vida real) y el juego te va a retar, algunas veces las pistas visuales no serán de ayuda y necesitarás confiar en que sabes seguir el patrón con la música. Eso a mi parecer es algo tan impresionante y que los niveles lo sepan explicar con una facilidad increíble por no decir que jugar cada nivel es divertido, tanto que querrás completarlo sin ningún error. al final de cada 4 niveles, nos encontraremos con un remix que combinará los 4 patrones rítmicos y vera que tanto has "internalizado" estos ritmos en tu vida.
La decisión de diseñar esto es parecido a la enseñanza musical en relación al entrenamiento auditivo.
En total hay 50 canciones, de los cuales 10 son remixes y 40 son niveles normales. Los 3 últimos remixes cojen al azar de los 28 patrones rítmicos para hacer canciones pop de Japón y uno que coje todos los patrones rítmicos. De los 40 niveles comunes, 12 son niveles ya vistos con más dificultad que retan al jugador mucho más. Lo que uno piensa al ver estas cifras es pensar que reciclan mucho contenido, yo creo que no. Este producto ante todo es un juego, no una clase de entrenamiento auditivo 101, por lo que poner más patrones rítmicos no hubiera sido del todo idóneo y me parece que es una jugada bien pensada en todos los sentidos.
Hay añadidos extras como niveles de títulos anteriores que están bien y minijuegos que no tienen el magistral diseño del juego en general. El modo de dos jugadores esta bien, mas hubiera sido interesante agregar nuevas canciones y quizás un remix por lo que se siente algo no tan aprovechado. Las medallas
Musicalmente el juego es algo variado musicalmente, quizás hay 5 canciones que no esten al mismo nivel debido a que son muy sosas melódicamente y armónicamente, todos con el factor común de hacer destacar más al patrón rítmico. Pero las demás canciones son buenas y variadas con esta esta sonoridad tan peculiar de "Nintendo".
Concluyo en lo siguiente. Este juego es una experiencia no solo divertida de jugar, si no que sin querer (o queriendo) ayuda a formar una habilidad pasiva como puede ser la precisión rítmica de una forma tan amena y divertida, que sabe moderarse en su dificultad para que sea una grata experiencia. Lo recomiendo mucho.
En este juego de ritmo tienes que que imitar patrones melódicos de una complejidad rítmica básica-intermedia. Todo esto acompañado de situaciones alocadas, como proteger una cita pateando pelotas, ser parte de una marcha de flamencos o ser un samurai que da espadazos a seres de ultratumba, etc.
Lo que me gusta de este juego y de la saga en general y lo puedo corroborar como estudiante de música es que la idea del ritmo no es un agregado como puede ser los juegos de guitar hero, osu, friday night funking, Miku, etc. En estos juegos la música es un agregado a un gameplay que se basa en apretar botones que "siguen" de alguna forma a la música. Creo genuinamente que aquí reside la fortaleza de este juego.
Aunque parezca que lo que hace Rhythm Heaven Fever es mucho más simple que los otros juegos debido a que solo apretas un botón o dos (depende del nivel), creo que lo mágico del título es que te obliga a internalizar los patrones rítmicos que presenta (explicándote los patrones detalladamente antes de cada nivel, cosa que se da en la vida real) y el juego te va a retar, algunas veces las pistas visuales no serán de ayuda y necesitarás confiar en que sabes seguir el patrón con la música. Eso a mi parecer es algo tan impresionante y que los niveles lo sepan explicar con una facilidad increíble por no decir que jugar cada nivel es divertido, tanto que querrás completarlo sin ningún error. al final de cada 4 niveles, nos encontraremos con un remix que combinará los 4 patrones rítmicos y vera que tanto has "internalizado" estos ritmos en tu vida.
La decisión de diseñar esto es parecido a la enseñanza musical en relación al entrenamiento auditivo.
En total hay 50 canciones, de los cuales 10 son remixes y 40 son niveles normales. Los 3 últimos remixes cojen al azar de los 28 patrones rítmicos para hacer canciones pop de Japón y uno que coje todos los patrones rítmicos. De los 40 niveles comunes, 12 son niveles ya vistos con más dificultad que retan al jugador mucho más. Lo que uno piensa al ver estas cifras es pensar que reciclan mucho contenido, yo creo que no. Este producto ante todo es un juego, no una clase de entrenamiento auditivo 101, por lo que poner más patrones rítmicos no hubiera sido del todo idóneo y me parece que es una jugada bien pensada en todos los sentidos.
Hay añadidos extras como niveles de títulos anteriores que están bien y minijuegos que no tienen el magistral diseño del juego en general. El modo de dos jugadores esta bien, mas hubiera sido interesante agregar nuevas canciones y quizás un remix por lo que se siente algo no tan aprovechado. Las medallas
Musicalmente el juego es algo variado musicalmente, quizás hay 5 canciones que no esten al mismo nivel debido a que son muy sosas melódicamente y armónicamente, todos con el factor común de hacer destacar más al patrón rítmico. Pero las demás canciones son buenas y variadas con esta esta sonoridad tan peculiar de "Nintendo".
Concluyo en lo siguiente. Este juego es una experiencia no solo divertida de jugar, si no que sin querer (o queriendo) ayuda a formar una habilidad pasiva como puede ser la precisión rítmica de una forma tan amena y divertida, que sabe moderarse en su dificultad para que sea una grata experiencia. Lo recomiendo mucho.