Brotherhood continúa la historia de Ezio, y es lo que debería haber sido la segunda entrega. Al menos en la mayoría de apartados.
Se continúa con la presentación impecable, y en este por fin hay una mejora gráfica, permitiendo disfrutar aún más de Roma y la miríada de detalles para dar vida a la época.
Aunque este juego añade poco en lo mecánico (como pasó con el dos), estos son más significativos. El más pequeño es, finalmente, la introducción de la ballesta. Este arma apareció en el tráiler del primer juego, pero no estuvo presente hasta Brotherhood.
El mayor añadido es el de reclutar asesinos. Estos te pueden ayudar para matar sigilosamente objetivos, asistirte en combate o hacer misiones en un minijuego "idle" que te recompensará con dinero, además de experiencia. La experiencia la ganan de ayudarte exitosamente o al hacer estas misiones, y a medida que avanzan adquieren mejores armas y armaduras.
La economía ha mejorado mucho, porque ahora el dinero que recibes en todo es menor. Ahora haces inversiones por toda Roma, por lo que te incentivan a explorar la ciudad, y retiras el dinero de Bancos repartidos por el mapa. Así, la exploración no se frena como antes. Cuando puedas retirar dinero, pasas por un banco de camino a la misión y listo.
Un último añadido que es pequeño pero significativo es el encadenar ejecuciones. Ahora cuando consigues matar a un enemigo, al atacar a otro inmediatamente pasas a la animación de ejecución. El dinamismo del combate al enfrentar a varios enemigos ha crecido mucho, removiendo el tedio de esperar un ataque, contraatacar, esperar, contraatacar, hasta que los 25 guardias murieron.
La historia es ligeramente mejor que en AC2, pero tampoco tanto. La familia Borgia son unos villanos más llamativos, y los aliados siguen siendo personajes distinguibles y distintos uno del otro, pero no termina de tener el impacto de la primera entrega. Y el hecho de que los asesinos reclutados para volver a formar la Hermandad sean npcs genéricos sin personalidad es una oportunidad perdida para darle más peso a las acciones de Ezio.
Con todo, es el lanzamiento que debería haber sido el 2. Expande y mejora en la jugabilidad del primero, la historia mantiene un nivel respetable, y la "aesthetic" de AC es tan potente como en su comienzo. El verdadero primer paso adelante de la franquicia.
Se continúa con la presentación impecable, y en este por fin hay una mejora gráfica, permitiendo disfrutar aún más de Roma y la miríada de detalles para dar vida a la época.
Aunque este juego añade poco en lo mecánico (como pasó con el dos), estos son más significativos. El más pequeño es, finalmente, la introducción de la ballesta. Este arma apareció en el tráiler del primer juego, pero no estuvo presente hasta Brotherhood.
El mayor añadido es el de reclutar asesinos. Estos te pueden ayudar para matar sigilosamente objetivos, asistirte en combate o hacer misiones en un minijuego "idle" que te recompensará con dinero, además de experiencia. La experiencia la ganan de ayudarte exitosamente o al hacer estas misiones, y a medida que avanzan adquieren mejores armas y armaduras.
La economía ha mejorado mucho, porque ahora el dinero que recibes en todo es menor. Ahora haces inversiones por toda Roma, por lo que te incentivan a explorar la ciudad, y retiras el dinero de Bancos repartidos por el mapa. Así, la exploración no se frena como antes. Cuando puedas retirar dinero, pasas por un banco de camino a la misión y listo.
Un último añadido que es pequeño pero significativo es el encadenar ejecuciones. Ahora cuando consigues matar a un enemigo, al atacar a otro inmediatamente pasas a la animación de ejecución. El dinamismo del combate al enfrentar a varios enemigos ha crecido mucho, removiendo el tedio de esperar un ataque, contraatacar, esperar, contraatacar, hasta que los 25 guardias murieron.
La historia es ligeramente mejor que en AC2, pero tampoco tanto. La familia Borgia son unos villanos más llamativos, y los aliados siguen siendo personajes distinguibles y distintos uno del otro, pero no termina de tener el impacto de la primera entrega. Y el hecho de que los asesinos reclutados para volver a formar la Hermandad sean npcs genéricos sin personalidad es una oportunidad perdida para darle más peso a las acciones de Ezio.
Con todo, es el lanzamiento que debería haber sido el 2. Expande y mejora en la jugabilidad del primero, la historia mantiene un nivel respetable, y la "aesthetic" de AC es tan potente como en su comienzo. El verdadero primer paso adelante de la franquicia.