Metroid se caracteriza por su énfasis en la exploración y su algo elevada dificultad, por suerte Return of Samus no es la excepción a esta regla, ofreciéndonos ambas cosas desde que iniciamos a avanzar. Aunque es un juego desarrollado para el limitado hardware de la primera consola portátil de Nintendo, Metroid II logra sumergirnos en un mundo laberíntico y peligroso, utilizando al máximo el potencial que ofrece una paleta de dos colores y sonidos monofónicos entregando un mapeado creíble y lleno de vida, si no somos tan exigentes. Desde un principio tenemos una misión, acabar con la plaga Metroid en su planeta de origen, a medida que vamos avanzando por el juego un contador nos muestra cuántos enemigos más tenemos que derrotar para llegar hasta el final, pero seguir adelante no será sencillo, ya que tenemos que inspeccionar cada recoveco para encontrar esas mejoras que necesitamos y sobrevivir a los enemigos que estarán esperándonos con el fin de hacernos ver esa molesta pantalla de game over. No es un juego que todos puedan disfrutar por igual, pero si eres de los que gustan de la exploración y los juegos no lineales, es una buena opción para comenzar, ya que de los Metroid que se encuentran en el mercado, es uno de los más accesibles para todos en términos de jugabilidad.