Fue de los primeros juegos que tuve. Me voló la cabeza de pequeño y me sigue flipando a día de hoy. Una odisea por el espacio en la que recorrer un montón de galaxias únicas y perderse en sus planetas.

El juego es una clara continuación del Super Mario Galaxy, juego que revolucionó el género de los plataformas en 3D con su uso de la mecánica de la gravedad entre otras cosas, y puso el listón muy alto para los siguientes juegos del género. Esta segunda entrega no innova mucho respecto a este, pero todas la mecánicas y elementos nuevos que añade se sienten muy bien. La historia palidece frente a la de la primera entrega: no es muy emotiva y se siente casi como una tarea que hacer. Pero el resto de elementos del juego (increíble banda sonora y apartado visual, excelente diseño de niveles y sensación de movimiento del personaje, ...) son más que suficiente para hacer de Super Mario Galaxy 2 una obra maestra.

Si bien es cierto que estos elementos ya estaban presentes en el 1, la experiencia era tan buena que no importa repetir, y se podría decir que el segundo juego es lo suficientemente distinto como para justificar su existencia. El hub de Super Mario Galaxy 2 es una clara mejora respecto al del primer juego. Además, el ligero aumento de dificultad respecto a la primera entrega se agradece mucho y hace el juego más interesante.

Parece que la filosofía detrás del juego sea que todo lo que puede hacer el jugador sea entretenido e interesante. Y la verdad es que lo consigue. Acciones tan básicas como moverte o recolectar trozos de estrella apuntando con el mando ya son sorprendentemente divertidas y satisfactorias. Conseguir unas bases tan sólidas me parece la clave del éxito del juego.