Me violó un Don Quijote dorado. ¿Qué más puedo pedir? Ah, sí, que me arranquen los ojos y las extremidades. ¿Qué más puedo pedir? Ah, sí, morir de inanición en un pozo de mierda. ¿Qué más puedo pedir? Una mecánica de cortar tus propias extremidades gangrenadas.