Muchos títulos, sobre todo de la escena indie, se ven solapados para representar meras experiencias anexas a otros grandes de la industria, como lo son Sekiro, el cual forjó el género de parry por excelencia. Aun así, existen excepciones que logran convertirse en juegos que funcionan perfectamente por sí mismos, a pesar de sus influencias.

Este es el caso de "En Garde!", un indie con diversas bases, pero con un carisma desbordante. Nos encontramos en un ambiente español, en el que somos Adalia, una espadachín, que tiene que superar diversos escenarios en búsqueda de erradicar la corrupción de su gobierno. La mecánica principal funciona con parrys o bloqueos perfectos, además de esquives que irán bajando la barra de postura de nuestros enemigos.

¿Qué hace entonces a este título especial y diferente a Sekiro? Gratamente, existe un elemento del gameplay que logra que esta experiencia sea sumamente única y diferente a las demás. La jugabilidad nos traslada de escenarios tales como patios, callejones, puertos, entre otros entornos, los cuales están repletos de objetos que podemos usar a conveniencia, y los que deberemos utilizar para planear una estrategia que nos ayude a vencer. Cubetas de agua, barriles explosivos, cañones, trampas, e incluso pollo frito serán más que imperantes para lograr el cometido de Adalia, acompañado asimismo de un sistema de plataformeo y aventura más que competente.

Si bien este título tiene pequeños bugs y momentos engorrosos, así también como ciertas batallas que bordean lo injusto, brilla por su estilo gráfico caricaturesco, su tono hilarante y ridículo, su música de flamenco y otras corrientes españolas, y, por sobre todo, su pulido y divertido gameplay.