JO-DER! No tengo más que elogios para este título, de lo mejor que he podido experimentar junto con Hollow Knight dentro del género.

Ya me gustó el remake de Metroid Prime, pero es que es jugar a Dread y tener todo eso y mucho más. Es intuitivo, rápido, exigente y el control es fluido y totalmente gratificante. Los jefes finales son una absoluta maravilla en su práctica totalidad y que sea en 2D gana enteros ya que considero que es como debe ser un metroidvania (no me malinterpretéis, Prime me flipó, pero es que Dread me ha conquistado). Los decorados y gráficos son preciosos y la exploración es dinámica y no se hace pesada en ningún momento como si me pasó con Prime.

Metroid Dread es un juegazo de manual.