El LoL es lo que tiene. El juego en sí tiene un buen planteamiento como MOBA (siempre y cuando tengamos también en cuenta que algunos campeones son muy malos y otros son muy buenos), separándose por líneas y por naturalezas jugables (tanque, apoyo, etc), aparte de tener varios modos de juegos muy enfocados a la competitividad y a la autosuperación, además de llevarnos a jugar más por las diferentes skins de nuestros personajes y las maestrías y puntos de los mismos. Pero el LoL tiene un GRANDÍSIMO problema: la comunidad.

El que esté libre de pecado que tire la primera piedra: yo no estoy fuera de cagarme en todo cuando un compañero mío hace algo que veo mal o que me perjudica a mí, ya que el LoL es un juego de mucha cooperación, donde feedear a un enemigo puede costarle la partida a todos. Aún así, el caso de este juego es ridículo, ya que parece que en una partida y en un mismo equipo hay profesores y alumnos, donde uno manda insultos por haber hecho algo mal y el otro los recibe con rabia al ver que, efectivamente, juega mal. Personalmente, soy una persona que tolera mal las críticas, especialmente cuando, efectivamente, he hecho algo mal, por lo que esta faceta totalmente inherente al LoL me resulta totalmente contraproducente cuando tengo una mala partida.

El sistema de reportes de Riot Games funciona de culo, puedes decir lo que te salga de los huevos que mientras no digas x palabra concreta no vas a ser castigado, por lo que los 'buenos' y los smurfers pueden decirte lo que quieran. El día que equilibren a los campeones y la comunidad de mierda que tiene LoL desaparezca mediante baneos estrictos u otras medidas, estaremos ante uno de los MOBA más importantes y divertidos de la Historia. De momento, se queda en un producto destinado a elitistas y ególatras.

Reviewed on Aug 30, 2022


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