RANGERS DEL DESIERTO HELADO
Por fin, tras mucho tiempo desde su anuncio allá por 2016, tenemos aquí el retorno de inXile con una tercera entrega de Wasteland que es, sin lugar a dudas, no solo la mejor de todas, sino que también es uno de los mejores CRPG's que han aparecido en los últimos años.
Wasteland 3 arranca fuerte, tras los hechos que daban fin a la anterior entrega, los Rangers necesitan con urgencia encontrar nuevos suministros y recursos más allá de Arizona para garantizar su supervivencia, lo que les pondrá rumbo a la región de Colorado en pleno invierno tras recibir una generosa oferta del líder regente de ese territorio, quien les ofrece todo lo que necesitan a cambio de llevar a cabo una peligrosa tarea. Así da comienzo la trama de Wasteland 3, una trama que sin ser nada rompedora, nos va a mantener en vilo durante decenas de horas y lo que es aún mejor, nos va a poner contra las cuerdas en más ocasiones de las que nos esperamos. Y pese a que su argumento se sigue bastante bien sin haber jugar a la segunda parte, sí que perderemos multitud de referencia, tendremos algunas lagunas e incluso el impacto no será el mismo cuando nos topemos con viejos conocidos. Por lo que es muy recomendable jugar Wasteland 2 antes.
Y es que si hay algo en lo que de verdad Wasteland 3 destaca por encima de todo, es en lo que respecta al argumento, toma de decisiones y las consecuencias de dichas decisiones. Es francamente sorprendente como cualquier cosa, por nímia que sea, puede dar pie a consecuencias totalmente inesperadas y/o sorprendentes. Sí, en muchos RPG's tenemos esto, pero de verdad, muy, muy pocos juegos lo hacen con la maestría de Wasteland 3. Es un no parar de situaciones límite, en las que no está claro qué es bueno y qué es malo, de hecho, jamás hay nada absolutamente bueno o malo, la escala de grises en este título está a la orden del día y es francamente gratificiante ver como se desarrollan los acontecimientos en base a nuestras decisiones, decisiones totalmente nuestras, mientras que al tiempo eres plenamente consciente de que podrías haber hecho otra cosa y que eso habría dado lugar a un desenlace completamente distinto o... a una locura total, pero que estaba ahí por si éramos lo suficientemente temerarios para asumir el resultado. Dicho todo esto, está más que claro que el juego es rejugable a más no poder.
Por otra parte, tenemos su combate por turnos, que gana aquí muchos enteros gracias a que se le ha dado bastante más dinamismo con respecto a Wasteland 2. Aquí cada enfrentamiento es totalmente distinto al anterior, jamás llegan a hacerse repetitivos o molestos, todo lo contrario, es toda una gozada combatir (salvo cuando la IA enemiga hace alguna tontería, todo hay que decirlo), y cosas como poder elegir a que personajes mover primero en nuestro turno, le dan ese toque interesante que le faltaba a la anterior entrega en este aspecto.
Hay también otras dos novedades muy interesantes que debutan en esta tercera parte. Por un lado tenemos la base de los Rangers en Colorado. Esto no se limita a ser nuestro centro de operaciones sin más, también es una parte jugable activa, pues deberemos buscar personal para las distintas áreas (zona médica, armería, garage etc) y dichos personajes nos los encontraremos a lo largo y ancho del mundo del juego, donde ya sea tras algún acontecimiento argumental, o que hagamos alguna misión secundaria (todas ellas muy interesantes, no hay ni una secundaria de relleno), se ofrecerán a prestarnos nuestros servicios.
Al margen de eso, en nuestra base también se sucederán toda clase de acontecimientos en forma de misiones en las que podremos y de hecho deberemos, intervenir. Ya os adelanto que ahí también os aguardarán toda clase de misterios y crisis que resolver.
La otra novedad es el hecho de movernos entre las zonas del juego, es decir el mini mapa, esta vez es mucho más espectacular, pues se representa de forma realista, mientras que nosotros nos desplazamos en el Kodiak, un vehículo armado y acorazado que deberemos ir mejorando en nuestro taller con mejores piezas y armas. En el mapa también nos esperan multitud de eventos aleatorios, combates y secretos de muchos tipo. Por lo tanto, en esta ocasión, esa faceta está también muchísimo mejor llevada a cabo y lo que es más importante, resulta muy entretenida, en contra posición al soso mapa mundi de Wasteland 2.
Audiovisualmente también ha ganado muchos enteros. La variedad de escenarios es notable y lo bien recreados que están todos ellos es magnífico. Evidentemente no es ningún portento, aunque tampoco se espera eso de este tipo de juegos, pero sin duda cumple de sobra con todo. Mientras que la música, acompaña a la perfección en todas y cada una de las situaciones. Mención especial a algunos temas que suenan en distintos momentos clave del juego, que a todas luces están a otro nivel, serán una absoluta sorpresa que sonarán cuando menos te lo esperes.
En resumen, inXile ha puesto toda la carne en el asador para crear Wasteland 3. Se nota también la inyección de recursos por parte de Microsoft desde que les adquirieron, por lo que el resultado final es sencillamente el mejor CRPG que he jugado desde Divinity: Original Sin 2 y eso es ya mucho decir. Si te gusta este género, no te lo pienses ni un segundo, acertarás fijo con Wasteland 3. Como apunte final, decir que también se puede jugar todo el juego en cooperativo, aunque yo he jugado en solitario, de modo que no puedo opinar de su funcionamiento.
Por fin, tras mucho tiempo desde su anuncio allá por 2016, tenemos aquí el retorno de inXile con una tercera entrega de Wasteland que es, sin lugar a dudas, no solo la mejor de todas, sino que también es uno de los mejores CRPG's que han aparecido en los últimos años.
Wasteland 3 arranca fuerte, tras los hechos que daban fin a la anterior entrega, los Rangers necesitan con urgencia encontrar nuevos suministros y recursos más allá de Arizona para garantizar su supervivencia, lo que les pondrá rumbo a la región de Colorado en pleno invierno tras recibir una generosa oferta del líder regente de ese territorio, quien les ofrece todo lo que necesitan a cambio de llevar a cabo una peligrosa tarea. Así da comienzo la trama de Wasteland 3, una trama que sin ser nada rompedora, nos va a mantener en vilo durante decenas de horas y lo que es aún mejor, nos va a poner contra las cuerdas en más ocasiones de las que nos esperamos. Y pese a que su argumento se sigue bastante bien sin haber jugar a la segunda parte, sí que perderemos multitud de referencia, tendremos algunas lagunas e incluso el impacto no será el mismo cuando nos topemos con viejos conocidos. Por lo que es muy recomendable jugar Wasteland 2 antes.
Y es que si hay algo en lo que de verdad Wasteland 3 destaca por encima de todo, es en lo que respecta al argumento, toma de decisiones y las consecuencias de dichas decisiones. Es francamente sorprendente como cualquier cosa, por nímia que sea, puede dar pie a consecuencias totalmente inesperadas y/o sorprendentes. Sí, en muchos RPG's tenemos esto, pero de verdad, muy, muy pocos juegos lo hacen con la maestría de Wasteland 3. Es un no parar de situaciones límite, en las que no está claro qué es bueno y qué es malo, de hecho, jamás hay nada absolutamente bueno o malo, la escala de grises en este título está a la orden del día y es francamente gratificiante ver como se desarrollan los acontecimientos en base a nuestras decisiones, decisiones totalmente nuestras, mientras que al tiempo eres plenamente consciente de que podrías haber hecho otra cosa y que eso habría dado lugar a un desenlace completamente distinto o... a una locura total, pero que estaba ahí por si éramos lo suficientemente temerarios para asumir el resultado. Dicho todo esto, está más que claro que el juego es rejugable a más no poder.
Por otra parte, tenemos su combate por turnos, que gana aquí muchos enteros gracias a que se le ha dado bastante más dinamismo con respecto a Wasteland 2. Aquí cada enfrentamiento es totalmente distinto al anterior, jamás llegan a hacerse repetitivos o molestos, todo lo contrario, es toda una gozada combatir (salvo cuando la IA enemiga hace alguna tontería, todo hay que decirlo), y cosas como poder elegir a que personajes mover primero en nuestro turno, le dan ese toque interesante que le faltaba a la anterior entrega en este aspecto.
Hay también otras dos novedades muy interesantes que debutan en esta tercera parte. Por un lado tenemos la base de los Rangers en Colorado. Esto no se limita a ser nuestro centro de operaciones sin más, también es una parte jugable activa, pues deberemos buscar personal para las distintas áreas (zona médica, armería, garage etc) y dichos personajes nos los encontraremos a lo largo y ancho del mundo del juego, donde ya sea tras algún acontecimiento argumental, o que hagamos alguna misión secundaria (todas ellas muy interesantes, no hay ni una secundaria de relleno), se ofrecerán a prestarnos nuestros servicios.
Al margen de eso, en nuestra base también se sucederán toda clase de acontecimientos en forma de misiones en las que podremos y de hecho deberemos, intervenir. Ya os adelanto que ahí también os aguardarán toda clase de misterios y crisis que resolver.
La otra novedad es el hecho de movernos entre las zonas del juego, es decir el mini mapa, esta vez es mucho más espectacular, pues se representa de forma realista, mientras que nosotros nos desplazamos en el Kodiak, un vehículo armado y acorazado que deberemos ir mejorando en nuestro taller con mejores piezas y armas. En el mapa también nos esperan multitud de eventos aleatorios, combates y secretos de muchos tipo. Por lo tanto, en esta ocasión, esa faceta está también muchísimo mejor llevada a cabo y lo que es más importante, resulta muy entretenida, en contra posición al soso mapa mundi de Wasteland 2.
Audiovisualmente también ha ganado muchos enteros. La variedad de escenarios es notable y lo bien recreados que están todos ellos es magnífico. Evidentemente no es ningún portento, aunque tampoco se espera eso de este tipo de juegos, pero sin duda cumple de sobra con todo. Mientras que la música, acompaña a la perfección en todas y cada una de las situaciones. Mención especial a algunos temas que suenan en distintos momentos clave del juego, que a todas luces están a otro nivel, serán una absoluta sorpresa que sonarán cuando menos te lo esperes.
En resumen, inXile ha puesto toda la carne en el asador para crear Wasteland 3. Se nota también la inyección de recursos por parte de Microsoft desde que les adquirieron, por lo que el resultado final es sencillamente el mejor CRPG que he jugado desde Divinity: Original Sin 2 y eso es ya mucho decir. Si te gusta este género, no te lo pienses ni un segundo, acertarás fijo con Wasteland 3. Como apunte final, decir que también se puede jugar todo el juego en cooperativo, aunque yo he jugado en solitario, de modo que no puedo opinar de su funcionamiento.