Un juego muy de género diseñado por un jugador experto en el género. Marca todas las casillas del danmaku canonizadas por Cave y el resultado es media hora de partida compleja y densa, de niveles compactos y variados, con enemigos y situaciones diseñadas al milímetro y jefes multifásicos con muchas partes rompibles. Destaca sobre todo su sistema de puntuación, divertido de entender y aprender, incluso para alguien que no se ha sacado el 1cc todavía. Es lo que termina por dar forma a su plano de acción activo que te hace buscar por la pantalla a los enemigos y conectar cadenas y combos, solapado con el siempre presente plano reacctivo de esquivar proyectiles y bailar entre densas cortinas de balas.

Pero, es un juego tan de género que resulta hasta canibalesco. Es un elaborado ecosistema cultivado dentro de si mismo y huele a cerrado. Si no conoces de dónde viene todo el rollo de las medallas y los números excesivos, mirándolo con cierta distancia te cuestionarías si es un matamarcianos o un casino online. Lo peor es que detrás de esta estética no esconde ningún tipo de sistema de azar, solo gratificación visual ludópata. Si te implicas con Crimzon Clover tienes por delante horas de acción frenética y exigente, empaquetada en partidas de escasa media hora. Algo que pocos juegos modernos son capaces de ofrecer, pero yo, después de esto, solo quiero jugar a un juego de navecitas donde matar una nave solo implique una efímera explosión y no desencadenar el premio de la tragaperras

Reviewed on Nov 17, 2022


Comments