Mario es una apuesta segura en esto de jugar videojuegos, y el mimo que dedica Nintendo a sus entregas plataformeras ha sido engrasado con los años hasta alcanzar el nivel de perfección. No obstante, la fórmula 2D de la saga se había quedado estancada por la monótona repetición de las entregas New y su descuidada presentación visual.

Wonder responde a estas diferencias con la entrega más adorable y accesible de la serie, que constantemente va proponiendo nuevas ideas para romper la monotonía y evitar las odiosas comparaciones con sus predecesores. Es tan divertido como de costumbre, y encima ha recibido un notable upgrade en su apartado visual para que nadie pueda burlarse entre esos pánfilos tugurios de Internet. Sin embargo, creo que en su atrevimiento termina pecando de ser muy predecible y rígido en su estructura, convirtiendo el resto del nivel en un preámbulo a la consecución de una Flor Maravilla. No es que tengan un diseño pobre en sí, pero al hacer las fases más pequeñas de lo habitual y con abundancia de power-ups para facilitar que el jugador posea la transformación adecuada para el momento adecuado, rara vez da la sensación de que estemos saliéndonos del guion previsto por Nintendo.

Como si fuésemos una cobaya guiándose a través de un laberinto, ¿hasta qué punto toma sus propias decisiones, o actúa por un estímulo convenientemente colocado por el diseñador? En consecuencia, la jugabilidad se sabe menos orgánica y más dependiente a la maravilla que esconde cada nivel (como si hubiese necesidad de que todos tengan una, y casi siempre en la segunda mitad de la fase). Falta espacio para la experimentación, y falta desafío que ponga en valor lo que hayamos aprendido. Wonder es una de las entregas más fáciles de la serie y la gran mayoría de obstáculos que introduce están bastante desaprovechados. No pido necesariamente abrazar la (sobrevalorada) cultura Kaizo como si no hubiese un mañana. Pero un mundo extra al menos, más difícil de lo habitual, no le hubiera venido mal. No cuento el nivel final-final por razones obvias e invisibles.

Todo esto no quita que Wonder tenga grandes aciertos y detalles en su diseño global. Encontrar una tubería en el mapamundi que haga de tease de próximos mundos a visitar está guay. Jugar con las princesas está guay (aunque los personajes ya no posean características propias que los distingan, eso no está tan guay). La introducción de medallas para emplear habilidades secundarias es una forma estupenda para ofrecer opciones de accesibilidad para quienes quieran (y no). El multijugador funciona, ya es un avance respecto al de los NSMB. Y por supuesto, coser a balazos a las plantas Piraña cuando cantan está brutalmente guay.

'Super Mario Bros. Wonder' es una maravilla de juego, valga la redundancia. Pero da la sensación de que parte de la esencia Mario se ha perdido entre la purpurina que desprende.

Reviewed on Oct 25, 2023


3 Comments


7 months ago

Me sorprende que te guste tanto a pesar de todo lo que comentas. Y un apunte, a mi el multiplayer me parece bastante peor que el de los New por el mero hecho de que la cámara siempre sigue siempre al jugador 1, cosa que complica la jugabilidad y la sincronización de manera innecesaria por pura incomodidad y arruina la experiencia para todos los jugadores.

7 months ago

No es que el multijugador de Wonder sea perfecto, pero la verdad, que no colisionen los jugadores entre sí ya lo hace mejor que en los NSMB. Siempre dio más inconvenientes que ventajas a mi modo de entender, especialmente en los momentos que se requería mayor precisión.

7 months ago

Que los jugadores puedan interactuar entre ellos es una de las cosas mas divertidas del multi de los NSMB