Sensaciones encontradas con este título. Por un lado todo lo que cuenta me gusta, lo jugable pese a ser simple es bastante divertido y artísticamente es precioso, pero la realidad es que me aburrí jugándolo en muchos tramos hasta el punto de casi abandonarlo y tengo la sensación de que dura, tranquilamente, el doble de lo que debería.

La historia es simple pero bastante interesante, muy al estilo de la saga Mother. Aunque si me dan a elegir, me quedo con el estilo de la saga clásica, porque creo que su humor y su trasfondo está bastante más estilizado.

Jugablemente es muy sencillo, una ruleta de armas para diferentes situaciones, un par de personajes que ir alternando por el mismo motivo, y poco más. Ni demasiado ni demasiado poco, lo justo. El problema, como dije antes es su duración (en torno a las 20 horas me ha durado) que hace que repetir lo mismo una y otra vez, con zonas, mecánicas, enemigos y misiones muy similares hace que el jugador se agote mentalmente.

Donde más brilla es sin duda en el arte. Posiblemente, el pixelart más bonito que yo haya visto nunca, si no abandoné mi partida es en gran parte culpa de esto.

En definitiva, es un juego recomendable, pero es una lástima que se haya quedado un poco por el camino debido a sus enormes ambiciones.