Lo tengo desde el día de salida, no lo había jugado hasta casi dos años después y me arrepiento, se ha convertido de golpe en uno de mis JRPG favoritos. Nunca había jugado un Yakuza y aunque sabía que este cambiaba incluso de género, no sabía muy bien que me iba a encontrar, pero me ha ganado por todos los lados y va a conseguir que me juegue a los seis títulos pendientes.

La historia es seria, profunda y maravillosamente conducida por un guión que no hace aguas en ningún momento. Además tiene unos toques de humor geniales, pero que en ningún momento hace que el tono serio general de una historia de mafiosos pierda el tinte. Quizá, lo más reprochable sea el final, que se concierte en un poco en una telenovela venezolana, pero bien igualmente.

Jugablemente es un JRPG por turnos de toda la vida, pero con variaciones importantes como la inclusión de parries, turnos variables dependiente de los stats de los personajes y una serie de mecánicas muy actualizadas que permiten que sea un soplo de aire fresco en el género y en la saga. Gráficamente es espectacular, Ryo Ga Gotoku hace magia con este motor. La banda sonora también es un 10.

Por comentar un detalle negativo, o de lo que menos me gustó, es el hecho de que las cinemáticas son larguísimas y muy abundantes. Sé que es así en toda la saga y spinoffs de la misma, pero la verdad es que soltar el mando durante largos periodos se hace un poco tedioso a veces.

Reviewed on Sep 26, 2022


Comments