Me cuesta bastante hacer una reseña de este juego y darle un puntaje. Principalmente porque tengo conflictos entre lo que significa Outer Wilds para mi como experiencia vs lo que se sintió jugarlo como videojuego.

Como juego siento que tiene una falta muy grosera: es un juego de puzzles y para mi en un juego de este género, lo complicado debe estar en entender el puzzle y llegar a la respuesta, pero la ejecución de la respuesta debería ser rápida. En outer wilds muchas veces te encontrás con algo que crees que es la solución y probarlo es tedioso, hay que esperar y por ahí la ventana de tiempo para probarlo es chico. En algunos casos todo ese esfuerzo y tiempo terminan en que la solución no era la que pensabas (o la ejecutas mal) y terminas volviendo a tener que esperar para volver a intentarlo.
Jugar Outer Wilds es frustrante, es tedioso y es incómodo, pero siento que ahí también está su magia. Outer Wilds se trata de no saber, y "no saber" es completamente válido. Se trata de que hagas tus propios experimentos para llegar a la verdad (cosa que maneja muy bien, porque el juego es muy consistente con su realidad y "reglas").

Diría que este juego no es accesible, y al mismo tiempo esa falta de accesibilidad lo hace especial. Entre más sabes del juego por fuentes externas más fácil es jugarlo (y mas fácil es convencerte de no abandonarlo hasta el final). Entre menos sabes del juego más jugo le vas a sacar, pero es más fácil que lo dejes o te trabes.

Me cuesta tanto recomendar un juego que durante las primeras 5 horas no me divertí para nada, pero mas me costaba dejar de pensar a donde ir luego, incluso luego de parar de jugarlo y siento que eso es lo más poderoso de Outer Wilds.