Metroid 1986

Log Status

Completed

Playing

Backlog

Wishlist

Rating

Time Played

--

Days in Journal

1 day

Last played

November 3, 2021

Platforms Played

DISPLAY


Un espacio complejo a resolver y conquistar. Lleno de trampas, pasadizos, recovecos y secretos que de verdad son secretos.

Es gracioso que la crítica más repetida a este juego sea que presenta un mapa obtuso, donde es difícil orientarse, demasiado abierto desde el principio, con caminos sin salida, salas idénticas que se confunden y bucles que te devuelven al punto de partida. Un juego en el que es fácil perderse... ¿Pero no es ese el punto? Nos estamos infiltrando en una base secreta de piratas espaciales, qué menos que nos obliguen a orientarnos y descubrir el camino por nuestra cuenta. Orientación espacial y experimentación con los recursos a nuestro mano.

¿Lo malo? La acción no acompaña a la exploración. Se ha repetido mucho que el salto flotante busca reflejar la sensación de baja gravedad. Lo que no me convence de este argumento es el control aéreo absolutamente digital. Saltar en el espacio te pide algo mucho más analógico. Solo hay que ver vídeos de astronautas dando brincos en la luna para entender esto. Me cuesta ver este salto como una decisión voluntaria y no como una incapacidad de programar un desplazamiento espacial minimamente interesante. Que el equipo de desarrollo fuese R&D1(Super Mario Land e Ice Climbers entre otros) parece confirmármelo. Cuando en un plataformas de acción falla el movimiento, arrastra consigo el combate, y Metroid no es excepción. De nuevo, habrá quien diga que el que sea tan malo es decisión voluntaria para general incomodidad e indefensión, pero es una canción que suena demasiado a "los controles de tanque contribuyen a generar terror". Aun con eso, la acción resultaría pasable si no se intercala con aburridas sesiones de farmeo.

El resultado es un juego que apunta a obra maestra pero se queda por el camino. Una aventura de exploración y conquista de un espacio alienígena sin elementos de acción a la altura que refuercen una genuina sensación de indefensión, de sentirse superado por un entorno hostil.