No sabe decidirse entre si es un hack and slash, un juego de puzzles tipo Zelda o un juego de equilibrismo. Los puzzles son torpes y lentos y los controles dejan mucho que desear. Le faltan muchos bosses.
Me gustan los rogue lites en los que tienes las mismas oportunidades al empezar cada partida, quitando pequeños desbloqueos. Aquí hay que farmear para poder avanzar. La forma de añadir representación lgtb pero poner ser gay al mismo nivel que tener miopía o hiperactividad no me convence.