La profundidad con la que cuenta este juego es una locura. El lore es impresionante, escondiéndose en los pequeños detalles de los magníficos fondos y en las descripciones de los artefactos.

La música: una obra maestra. Junto con el diseño de audio elevan la experiencia de una manera impresionante, destacándose en las peleas épicas contra los jefes del juego.

Este juego se presenta como un desafío elevado que pone constantemente a prueba al jugador y sus habilidades, pero nunca se siente injusto apesar de la elevada curva de aprendizaje con la que cuenta.

Todo esto combinado crea un increíble juego que además de entretener, emociona y rompe con todas las reglas de lo que es un metroidvania. Ya se empieza a sentir su influencia en otras obras más actuales lo cual era de esperarse ya que define el futuro del género y dejó una marca duradera en la industria.

Legendario le queda corto a esta obra. Si algún día alguien te dice que los juegos no pueden ser arte, cerrales el orto con este juego.

De lo mejor que jugué en los últimos años. Por más de que la siguiente entrega mejora todos los aspectos de este juego, impresiona la calidad técnica con la que cuenta siendo un juego lanzado hace 7 años.

Además, te sumerge en un mundo desolado que se encuentra al borde de la destrucción, donde se siente la desesperación de un pueblo abandonado que necesita de un héroe. La historia cruda y emocionante te absorbe por completo, mostrándote el pasado desgarrador y las consecuencias que tiene en el presente del reino.

La música y el diseño de sonido elevan este viaje emocional por el destrozado reino de Hyrule, creando una atmósfera que te envuelve por completo. Es una experiencia que deja marca a aquellos amantes de la saga y es un excelente punto de entrada para los que quieran adentrarse por primera vez a ella.

Es una joya que no solo entretiene, sino que también deja una impresión duradera en aquellos que tienen el privilegio de jugarlo.