Una reivindicación de lo que puede ser un shoot em up moderno fuera del danmaku. Siguiendo el camino de los caravan de consolas y añadiendo capas y capas de profundidad. El resultado es uno fresco y dinámico a pesar de su cargada estética. No importa tanto el control de la pantalla como el liquidar enemigos de la forma más eficiente posible. El formato apaisado rima con el tema de jugar agresivo y sube un nivel más de intensidad cuando entras en modo berserk. Se puede quedar algo corto si solo te lo pasas por supervivencia, pero algo dentro te mueve a jugar por puntuación. No por escalar en las tablas de clasificación de steam, sino simplemente por la adrenalina que te da gastar tu última bomba en el boost y aguantarle la mirada al jefe final.

"Some people when they of think score, they think in the number. Like that was all that matters. Just increase a number.
You're playing with a different set of rules. That's what playing for score is. You're playing a game of t-ball. I'm playing Home Run Derby."