Pocas sagas son tan longevas, tan distintas y se reinventan tan sumamente bien como Final Fantasy.

Y muchísimas menos saben contar historias de fantasía (Irónica y redundantemente) bajo un sello de tantísima calidad como el que imprime Square Enix en sus obras.

Y es que esta entrega, la XVI, nos ofrece la crónica de lo ocurrido en Valisthea, la ficticia tierra donde viven Clive y su hermano Joshua. Todo parece ir bien hasta que... Se tuerce.

Y vaya si se tuerce.

Como no quiero entrar en spoilers, no avanzaré más en la trama.
Encarnaremos a Clive Rosfield, un GRAN protagonista que, casi de forma contracultural en este género, se aleja significativamente del prototipo de "Prota de RPG" cuyas características suelen ser no decir una palabra, no expresar emoción alguna pero eso si, ayudar a todo el que cruza media palabra con él, por mundana que sea la tarea y, sorpresa, salvar el mundo.

Nuestro guardia ducal (¿título? que ostenta) es un personaje profundo, con voz, voto y una identidad marcada que además experimenta un arco de persona muy por encima de lo esperable (Definitivamente, cine), siente, se enfada y defiende unos ideales bastante lógicos y creíbles.
No solo él, el resto de personajes (salvo alguna excepción) tienen una identidad diferenciada y poseen, en mayor o menor medida, carisma suficiente para ser recordados.

La banda sonora es una absoluta barbaridad, te lleva en volandas o de la mano según el momento de la experiencia. No podía ser de otra manera de la mano de Nobuo Uematsu, una leyenda viva y un maestro en su labor.

La jugabilidad es una maravilla, y aquí hemos venido a ver una buena historia, buena música pero sobretodo a ver esas irremplazables señas de identidad de la saga como son las invocaciones (AKA Eikons), magias y espadazos. Y vaya si lo hay. Los combates son el pilar que sujeta el juego, ofrecen distintas opciones y conforme avanzas el juego, más y más estilos se suman a los iniciales, siendo estos personalizables hasta cierto punto (que no es mucho, tampoco) pero hacen de las batallas algo entretenido.

Hablemos del aspecto gráfico y de los bosses. ¿Por qué juntos? Bueno, la aventura tiene uno de los apartados gráficos más cuidados que he visto en mucho tiempo. Es una delicia ver Valisthea, ciertos escenario, las expresiones faciales, los efectos como fuego, electricidad... Y luego están los bosses.

Probablemente a nivel espectacularidad y a nivel puramente visual, este juego tenga las mejores peleas contra jefes que he visto y jugado en mi vida.

Y en concreto, las batallas entre Eikons son otro nivel. Son un puñetazo sobre la mesa y son uno de los motivos por los que merece la pena vivir esta generación de consolas.

Y eso que, los mayores alardes de potencia vienen en semi-cinemáticas que incluyen quicktime events de tres botones. Si bien pudiera parecer que estos tres botones son pocos, son lo suficiente para que recuerdes que estas en un videojuego y no en una sala de cine y mantengas el mando en las manos y no en palomitas. Te recuerdan que, aunque no te lo creas, esto es un videojuego,

Y ahora hablemos de las partes menos buenas...

La duración es... demasiada para lo que el juego quiere contar. Y hablo de la linea principal de misiones. Le sobran horas que además no sientes en ningún momento que hagan el mínimo esfuerzo en disimular.
Mismos escenarios pasilleros llenos de enemigos cuyo único propósito es ralentizarte, minibosses (sin sentido argumental muchos de ellos) que son sacos de golpes, misiones "pseudosecundarias" que no se entiende que sean de la rama principal...

No es una cuestión de cinemáticas, que son geniales, por cierto. Es una cuestión de puro relleno. Y duele. Porque si el juego durase muchas horas menos, sería mucho mejor.

A veces más NO es mejor.

Pese a existir Eikons de todos los elementos (Ifrit Fuego, Titán tierra...) no existen ventajas o desventajas elementales. Es una bala que desaprovechan. Todo o baja escudo o baja puntos de vitalidad pero no se entiende como precisamente esta saga se deje eso pasar.

No hay profesiones o talentos.

En un momento dado la historia tiene un pico de epicidad de los que te hacen levantarte del asiento y, acto seguido, pega un inexplicable bajón que dura considerablemente. Si lo superas merecerá la pena, claro, pero duele siendo tan evitable.

Y por supuesto, las secundarias son inadmisibles en estos tiempos que corren. No aportan nada, no son atractivas, son repetitivas y están para hacer bulto. Y anda que no hay ejemplos a día de hoy en los que fijarse.

En definitiva, es un juego al que si mínimamente te gusta la fantasía medieval, la saga final fantasy, la espectacularidad visual, Juego de Tronos (en el que, en mi opinión, se inspira de forma acertada), los espadazos, los buenos personajes o monstruos gigantes dándose tremendas toñas... Es tu juego dale una oportunidad pero ármate de paciencia.


En una era plagada de juegos como servicio, skins, pases y boxes... Necesitas bucear un poco para encontrar tesoros como Dave the Diver.

Pero... ¿Un juego de bucear, pescar y "gestionar" un restaurante de Sushi? Créeme, no te arrepentirás.

Y es que estamos ante un juego que hace muchas cosas, muchísimas cosas... ¿Demasiadas?

Visualmente dan ganas de no apartar la vista en NINGÚN momento. Cada animación y cada corte parece estar hecho con sumo mimo y cariño. Da la sensación de que quien lo ha hecho de verdad está entusiasmado con lo que hace y... Lo transmite.
Incluso en los cortes de vídeo, que es otro apartado donde el juego se vuelve inolvidable. ¡Que cinemáticas!. De museo.

Los personajes, empezando por Dave y siguiendo con cada secundario y cada Boss, rezuman personalidad, garra, chispa... Es prácticamente IMPOSIBLE confundirlos. Son carismáticos y tienen sus momentos.

La banda sonora acompaña especialmente bien con melodías que te abrazan o te tensan cuando así lo requiere la aventura.

La historia va escalando, si bien tiene un punto en el que se hace ligeramente cuesta arriba (siendo este su principal defecto, alargarse de más) también diré que, en sintonía con el resto del juego es, genuinamente original.
Las secundarias cumplen su función, ni más ni menos algunas están más acertadas y otras podrían no estar. Otro punto de menos lucidez.

Y la joya de la corona o mejor dicho, la perla... Es la jugabilidad.
Y es que en todo momento el juego se reinventa, te sorprende, sube el listón y se supera así mismo. Quitarse el sombrero y aplaudir, no queda más.

Hay mucho, muy distinto y muy bueno que hacer. Es un juego MUY y voy a repetirlo MUY recomendable sin el bombo ni la publicidad suficiente y refleja un mimo y en definitiva, ALMA que es lo que necesita esta industria.

PD: Tiene homenajes y easter eggs a otras sagas míticas de videojuegos que no seré yo quien os revele pero, nostalgia, amigos.

Una realidad para no dejar de creer y soñar

Si has jugado videojuegos, probablemente o conozcas bien o te suene la expresión "¡¡Detras de ti, imbesil!!" (Si, con s).

Y es que yo era uno de las pocas almas de este hobby que no se había adentrado en la España gris y lánguida que dibujaba Capcom allá por 2005.
Y por muchos factores, además, como que no soy amigo de las experiencias de terror (y me es igual que sea cine, videojuego o parque de atracciones) realmente no comprendo como se disfruta de pasarlo mal.

PEEEEEEEEERO (como diría Joseju)

Este Resident Evil 4 era, es y será historia de los videojuegos. Y el remake le hace bastante honor así que...

Si, lo completé. Y si, lo hice en asistido (cosa de la que me arrepiento, pues fui bastante sobrado y no tenía necesidad) pero ¡entendedme! tenía miedo (y que bueno que estén los medios de comunicación... xD). A mi favor diré que solo varió mi experiencia en más munición, disparo ¿asistido? yo solío modificar mis tiros a headshot o pierna para suplex o patada, precios más populares y una ligera curación en momento de poca vida. De verdad, es menos de lo que parece y si lo volviese a jugar, sería en normal.

Resident Evil 4 Remake tiene muchas muchísimas cosas buenas. Si bien la premisa no es la gran revolución, el contexto y la forma de narrar la historia te llevan en volandas por la más absoluta angustia entre el oscurecido recuerdo de lo que antes fue un pueblo, un castillo, un lago... La banda sonora y sobretodo, los efectos de sonido mantienen tus sentidos en alerta felina durante practicamente toda la campaña.

Por suerte, no tiene Jumpscares (y si los tiene son pocos y creedme que si yo viví para contarlos, no son para tanto).
Es un survival horror pero tiene acción a raudales y te da la posibilidad de enfrentar lo que te aterra y por eso he podido completarlo. No se trata de huir, no se trata de encajar susto tras susto porque si... Nada de eso.

Los personajes tienen alma, todos ellos, desde Leon S. Kennedy hasta Lord Saddler poseen una identidad que hace que confundirlos sea incluso grosero.
Y a esto ayuda y mucho el renovado doblaje. Lo siento por los puristas que querían "ImbeSil", por aquí no es...

Y tal vez a la gente que haya jugado el original esto le decepcione pero como no es mi caso... No opino y celebro el trabajo bien hecho del equipo que le ha puesto voz a esta joyita.

Mención especial a momentos muy meme que tiene el juego en los que no se toma en serio a si mismo y, contra todo pronostico, le queda increíble.
Y hay muchos ejemplos: Desde las ejecuciones con patada giratoria al estilo Hwoarang, a los suplex sin olvidar de los mortales de espaldas para esquivar.

Sin embargo hay algunos "flecos" que impiden la matricula de honor de este perfil y, por suerte son pocos: Los puzzles, muchos y muchas veces cogidos con pinzas, la batalla final con Saddler (esperaba otra fasecita más o al menos algo más difícil la segunda fase final)... y poco más.

en resumen, un juego que si o si hay que jugar, solo así entenderás que...

Morir es vivir

O al menos largarte en moto acuática con el amanecer de fondo

Pocas veces uno se encuentra en este tesitura: ¿Cómo hacer una review de un juego que arruinas si hablas de él?

Literalmente podría dedicar tanto tiempo a hablar de este juego... Pero como pasa con Outer Wilds, es algo que debes vivir por ti mismo.

Sin entrar en el contenido del juego, las mecánicas están tremendamente bien pensadas e implementadas, la banda sonora es inmersiva y en cada momento golpea donde más duele, la historia... ya sabéis, no puedo decir nada, los gráficos pese a ser lo menos importante sorprenden para bien y la duración... Podría decir que se me hizo algo largo en el proceso y ciertas partes serían aun más disfrutables si fuesen UN PELÍN más cortitas pero por otro lado es un juego que terminas y... Te deja un vacío.

Por tanto no es perfecto, además personalmente un modo multijugador me entusiasmaría pero entiendo que esa no es la idea de este juego y hay obra que deben concluir.

Es no ya un juego, una historia o incluso una experiencia que tardaré tiempo en olvidar y que dudo que replique.

Pese a no ser perfecto se lleva el pequeño y casi nimio honor de mi máxima puntuación

It's a me, Mario!

Es muy difícil ser objetivo con uno de los mejores juegos de la historia. Toda una revolución. Sentó cátedra con el plus de ser MUY adelantado a su época. No tendremos en cuenta su trama debido a que, cuando salió, no había precedentes: Bowser secuestra a la princesa, consigue estrellas y rescátala.

Dicho y hecho. Pero es coger el mando y, sin apenas tiempos de carga, Mario recorre y explora tantos mundos como secretos en forma de mecánicas permitía la imaginación de uno de los mayores genios de la historia de la industria: Shigeru Miyamoto.

Fases absolutamente inolvidables, un diseño de niveles del que a día de hoy, casi 30 años después aun tiene mucho que decir, secretos por doquier y la sensación absolutamente arrolladora que no se puede hacer más con lo que había, o lo que es lo mismo, es casi perfecto.

La banda sonora con melodías reconocibles que harían historia ese año y los venideros, un Bowser que se presenta más amenazante que nunca (aunque no fuese para tanto) y toneladas de horas de diversión y devanarse los sesos por conseguir las estrellas que te faltaban en una época donde no abundaban las guías y no existía internet.

Por ponerle una sola pega, a día de hoy, la cámara puede ser un dolor de cabeza importante y ciertos niveles se vuelven muy frustrantes (Pero se entiende por cuándo salió y para que medios).

Un hito. Historia. La primera gran gesta en 3d del personaje más icónico de la historia de los videojuegos.

Si en la última reseña hablábamos de un gran juego con algunas carencias, en esta ocasión, Marvel's Spiderman 2 es algo a la altura de toda la expectativa posible.

Para esta aventura, encarnaremos a un Peter Parker más madura y con una trama más profunda y personal, que no solo lidiará con las responsabilidades de ser Spiderman, si no que se enfrentará a lo complicado de compaginarlo con tutorizar a Miles y con tener un trabajo más estable.
Por su parte, Miles Morales tendrá que afrontar sus propios demonios interno (pérdida, venganza, autocontrol...) a la vez que encara su futuro universitario y decide como enfocar su vida.
Ambos personajes tienen un desarrollo introspectivo que se agradece a la hora de darle un tono más adulto a la aventura.
Sin olvidar que la aparición de Venom o Kraven acentúa este proceso y les plantea no solo retos como heroes si no preguntas como persona.

Y es que el sistema de desplazamiento está sublimado y además añade la modalidad de "Volar/planear" para hacerlo aun más dinámico y veloz (que si, que era posible). Destacaremos el viaje rápido por ser el más organico y mejor implementado. Es prácticamente instantaneo. Una gozada a la altura de la nueva generación.

Por su parte el sistema de combate, que mantiene la base, agrega remates bastante más espectaculares y variados. Destacando ese modo "Berserker" que ambos tienen y que, con el traje de simbionte, se aprovecha sobremanera.

La historia principal mejora lo presente bastante dando como resultado una trama que te mantiene enganchado con pocos altibajos pero debo destacar la calidad de las misiones secundarias, si bien en anteriores juegos podrían ser repetitivas, en este presenta misiones secundarias (no todas) a la altura de los más grandes en este campo (The Witcher 3, Cyberpunk 2077 o el reciente Baldur's Gate) presentando variadas y bien diferenciadas mecánicas y temáticas desde lo más manido hasta temas MUY interesantes y poco afrontados en este medio (Ni puedo ni quiero desvelar más, jugadlas).

La banda sonora acompaña realmente bien y está perfectamente elegida e implementada. Nada que objetar.

Por último, en detalles a mejorar tenemos algunos bugs (lógicos y entendibles) en el tema de físicas (lo típico, quedarte atascado en edificios o caer bajo el mapa) y en lo personal echo TANTO en falta un sistema de karma con el traje negro y simbionte como vimos en el videojuego de la adaptación cinematográfica "Spiderman 3" y siento que la fase que controlas a Venom es prácticamente anecdótica para lo que podía haber sido y las alternativas que ofrecía el villano.

En cuanto a lo "más comentado"... Lo siento, no voy a entrar en polémicas. Es una escena donde se menciona en 2 o 3 ocasiones y me parecería injusto y sensacionalista teniendo en cuenta que no solo estamos ante uno de los juegos con más variedad y sobretodo más opciones de accesibilidad que he visto. Hace más bien que mal y me quedo con eso.

Un juegazo de los que debes tener o al menos, jugar si tienes una PS5 o si eres fan no solo del trepamuros, si no tambien de los superhéroes en general.

Motivado por la segunda parte de su homólogo cinematográfico, me dispuse a darle una oportunidad a la segunda parte del juego Spiderman de Playstation Studios, el protagonizado por Miles Morales.

Y me ha dado justo lo que venía buscando pero con varios peros. Lo bueno es que tenemos un juego muy entretenido, con un buen doblaje que hace que las bromas constantes del trepamuros sean geniales, una banda sonora a la altura de este videojuego (aunque por debajo de las dos películas de Spider-man de Morales).

Como siempre y siendo ya un mínimo exigible, la sensación de desplazarse con el lanzaredes por Nueva York es fantástica y pese a también ser algo heredado de su predecesor, tiene un personalidad propia a la hora de hacerlo (e incluso de aterrizar).

Los nuevos poderes de Miles están perfectamente integrados en lo que ya era un sistema fluido y satisfactorio, pero que sin embargo y en mi opinión va necesitando un cambio.

Y si, eso que zumba es vuestro sentido arácnido porque aquí llegan los peros: Es un juego tan corto que parece más un DLC del primero que un título propio, tiene unos puzzles con mecanicas contadas que se repiten de forma casi insultante y se echan en falta villanos clásicos a excepción de uno que, opinión personal, es de lo más flojito que podrían haber escogido (y repetido, dicho sea de paso).

Es, por suerte o por desgracia, el preludio a la segunda parte del juego original que le precede. El aperitivo entre Spiderman 1 y el ya anunciado y celebrado Spiderman 2, con uno de los mejores villanos de la saga ya confirmados: Venom.

Un saludo de su amigo y vecino

Azerep

Un gran juego conlleva una gran responsabilidad.

Este videojuego basado en la popular serie South Park y su correspondiente arco de superhéroes es una delicia para los amantes del universo creado por Trey Parker y Matt Stones.

Si bien desarrolla una historia original llena de bromas y desternillantes chascarrillos, tambien tiene una trama en la que de forma personalizada eres el "elegido". Esta repleto de referencias constantes a la serie y de mofas a Marvel, DC comics y demás pelis superheroicas.
Es importante destacar que es la continuación de La vara de la verdad y es necesario pasarte este para entender el contexto y que está pasando, especialmente en el inicio y final del juego.

El sistema de combate es una oda al género. Es sencillo, intuitivo y abierto a distintas estrategias. Sin embargo, en ciertos momentos la IA de los enemigos acusa el paso del tiempo y la falta de sentido en acciones puntuales, pero nada demasiado grave.

Tiene algunas secundarias destacables que lejos de marcar la diferencia, se limitan a ser misiones de recolectar distintos items, que de por si puede resultar tedioso y lo es más aun teniendo en cuenta que la recompensa no está a la altura del desafio.

Consta de un simple sistema de items con distintas mejoras que para nada son determinantes y se notan desaprovechados así como un sistema de crafteo que soluciona los dificilmente explicables precios de los items en las tiendas.

Los tiempos de carga en Switch en 2023 recuerdan más bien a varias generaciones atrás y esto se hace tediosísimo.

En definitiva, un gran juego con limitaciones que podría hacer mucho más con menos pero mejor hecho.

La nostalgia es un sentimiento, cuanto menos, ambiguo. Nos lleva a épocas pasadas en las que fuimos felices (aunque no necesariamente más felices, al menos de un modo distinto), pero al mismo tiempo nos sacude con la fría tristeza que produce sabernos incapaces de volver a esos momentos. Y eso es exactamente lo que siento con Pokemon.

Pokemon Rojo, Azul y Amarillo marcaron toda una generación, y pese a que no recuerdo si mi edición fue la Roja o Azul, si recuerdo la sensación de ser el protagonista cuando eres tu el que elige uno de los tres iniciales (Squirtle, ese si que no se me olvida). Ese fue mi primer juego de la saga y al que le dediqué una cantidad de horas brutales, además del primero con el que descubrí que más gente de mi edad jugaba a videojuegos.

Pokemon Verde hoja (siendo este un remake del primero, paradojicamente) fue el último que jugué. Era un cierre perfecto. Una etapa finiquitada (sin contar el fenómeno Pokemon Go).

Y entonces llegó Pokemon Púrpura.
¿Un juego de Pokemon con referencias a España, con nuevas mecánicas y para Nintendo Switch? Podrían ser razones suficientes pero la diferencial no fue otra que la social: Mis amigos también lo compraban.

Entonces me encontré que... No era lo mismo.
Para bien porque el juego es algo nuevo, fresco, dinámico con mejoras como que el PC de Bill ahora está integrado en el menú de Start o que MO's las lleva el Pokemon legendario sin ocupar espacios de ataque, la teracristalización añade un punto extra a la ya complicada tabla de tipos, el multijugador añade una vuelta de tuerca con las incursiones... Y por supuesto la historia.
La historia merece una mención aparte porque, por primera vez, es algo que recordaré en la saga. Primero por la libertad del mundo abierto para afrontar los gimnasios en el orden que quieras (Ya no sirve el truco de mi yo de niño que se beneficiaba de "pistola agua" de Squirtle contra los tipo Roca de Brock) y despues porque el giro final de la historia va más allá de los clásicos hazte con todos y vence al alto mando.

Y para mal porque el apartado técnico es un desastre que se acentúa mucho más sabiendo que es Pokemon el titulo ante el que nos encontramos y los beneficios que desde hace años ingresa. Es incomprensible la cantidad de fallos de rendimiento, bugs y destrozos en general con los que te topas. Probablemente mi yo de niño ni se habría enterado o se habría reído (que yo tambien, ojo) pero es duro de asimilar. Por otra parte el juego, en cada combate se esfuerza en darte las claves al lado de tus ataques con apuntes como "Eficaz" o "Supereficaz". No entro en el debate de la dificultad en Pokemon (Que ojalá uno así, por cierto), dado que entiendo que Pokemon esta dirigido para gente más joven y que aquí los intrusos somos nosotros pero eh! así funciona la nostalgia ¿no?.

En definitiva, es un gran juego que podría haber sido mucho mejor con más tiempo de desarrollo, al final, espero recordarlo así, con nostalgia.

Obra Maestra. Perfecto. Must, Masterpiece.

Y así podría estar todo el día y probablemente no rendirle el homenaje que se merece.

Es complicado hablar de un juego en el que, cuanto más digas, más arruinas la experiencia de quien lo juega. Por tanto no desvelaré absolutamente nada de la trama.

Juégalo. Y si ya lo has hecho, hablemos de él.

Es la obra magna de un estudio, Annapurna, que siempre ofrece algo distinto. Pero esto es otra cosa. Outer Wilds te marca irremediablemente (para bien o para mal). Reinventa su género desde la aparente sencillez (la cual muta por completo cuanto más te adentras en su universo).

Cada detalle, cada canción, cada lugar que visites... Se llevará parte de ti. Pero a cambio te llevarás parte de todo ello, para siempre.

¡¡Cowabunga!!

Desde la pantalla de inicio este juego transmite una sensación perfecta de como debe ser una buena adaptación: Escenarios vivos, diversos y orgánicos, Variedad de personajes jugables y de icónicos enemigos con sus respectivos sets únicos de movimientos y ataques, animaciones dinámicas, una paleta de colores vivos y casi hipnotizantes... Mecánicamente es impecable, los golpes, saltos y especialemente combos se sienten fluidos, orgánicos y realmente satisfactorios.

Cada detalle, el mapeado y como vas de un nivel a otro, está tratado con mimo y se nota. A destacar, su banda sonora impecable que nos trae temas clásicos perfectamente adaptados y algunos nuevos como el tema de la batalla final del juego que... Sorprenderá para bien.

Pese a su alta rejugabilidad, podría mejorar mucho si la duración del modo historia fuese mayor, si tuviese algún minijuego extra dentro del propio juego (Solo hay uno) y si los coleccionables y desafios se premiasen con algo más que puntos para subir de nivel (algún traje, ilustración o secreto extra).

Sencillamente mágico.

Recrea Hogwarts a la perfección, cada rincón es tan idílico como lo pudieses haber imaginado. Cada paso que das y cada descubrimiento que haces solo te lleva a querer descubrir los cientos que aun te quedan.

Una historia original y fantástica, sistema de combate consistente y único aunque con referencias fácilmente identificables, una linea de misiones secundarias que nada tienen que envidiar en muchos tramos a las misiones principales...

Aunque se echa en falta el Quidditch, un sistema de karma bien implementado que otorgue sentido y peso al uso de ciertas maldiciones y alguna interacción más que haga que los NPC sean algo más orgánicos y no parte de la decoración.

De lo mejor del año sin duda y mucho más disfrutable si eres fan del Universo Harry Potter.

El cocreador de Rick& Morty nos trae este hilarante y dinámico shooter que da más de lo que se podía esperar. Consta de una premisa tan absurda como válida, buena variedad de armas (personalidad y ataque especial incluido por cada una), unos bosses con carisma propia y unos golpes de humor que hacen que el juego funcione a la perfección. Por contra, algunos sistemas podrían estar mejor aprovechados, la ia de los enemigos es bastante escasa y los mundos se sienten estáticos y algo vacíos.