Al principio tenía muchas ganas de jugar al juego, y las primeras horas cumplieron con mis expectativas de una comunidad en un internet noventero ficticio en el que pasarlo bien, explorar, reirte...
Sin embargo según avancé fui perdiendo las ganas de jugarlo. Tras horas y decenas de personajes introducidos había perdido la cuenta de quien era quien, explorar ya solo se reducía a leer montañas de texto sobre drama o cultura ficticia así que procrastinaba jugar y además los puzles o acaban estando demasiado escondidos o requieren de moon logic.
Creo que he terminado el juego, porque tampoco te lo dicen claro. Admito que la "revelación final" me gustó bastante.
Hay muchas cosas que solo puedes completar en un determinado momento y no tengo ganas de rejugar el juego para completarlas.

La premisa es interesante pero el juego está crudo.
Todas las animaciones están mal, muchos modelos se atraviesan, la historia es simple y los diálogos son planos. Hay como 10 personajes principales y aparte de ellos todos los NPCs tienen unos 10 posibles modelos genéricos. Hay problemas de colisiones, de iluminación, popping... Ah, y hacía que mi PC crasheara si lo jugaba con el segundo monitor encendido.
Los minijuegos y QTE también me han parecido demasiado largos. Es el típico juego donde tus decisiones influencian la historia pero nunca sientes que tengas un impacto, tiene contenido político pero realmente es dicotómico y vacío. Y durante muchas cinemáticas donde interactúan otros personajes principales el tuyo simplemente desaparece.
Y es una pena porque la premisa y la mecánica principal están chulas pero jugarlo es doloroso porque está, pues eso, muy crudo.

Sushi Strikers es un juego sorprendentemente complejo y profundo para ser un jugo de 10€ (5€ de segunda mano en mi caso). Engancha muy rápido y puedes personalizar piñones, objetos, habilidades, genios...
Por degradia el jugo se hace repetitivo muy rápido ya que el modo historia son solo batallas y más batallas.
Pensaba completarlo porque pensaba que sería cortito pero luego me enseñaron el mapa y resulta que no iba ni por la mitad... y cuadno terminé, resulta que era solo la primera zona... así que no lo voy a terminar porque es repetir lo mismo una y otra vez. Pero el jugo está muy chulo.

Soy muy fan de la saga y tenía curiosidad por probar la primera entrega de esta.
El juego no decepciona, con contenido y más contenido, mucha calidad en este, minijuegos extra y demás. Eso sí, lo noto algo más dificil que los juegos más modernos.
También tiene fallos muy grandes como minijuegos que dependen demasiado de entender el idioma hablado o incluso de leer lyrics, y dado que lo jugué en japonés me dió algunos problemas y me atasqué ahí (maldito sea el dondo panpa). Como persona daltónica, también he tenido problemas con los colores en otros tantos minijuegos.
Pero hey, trae un tutorial de batería, eso mola un puñado.

Un pequeño juego de puzles que esconde una historia oscura y un segundo juego ligeramente más complejo (y una segunda historia) dentro de este.
El juego rompe la cuarta pared desde el primer momento.
La progresión, las formas de conseguir finales alternativos y la forma de llegar al "segundo modo" y demás no son explicados en ningún momento y son muy crípticos. Son inalcanzables sin una guía, de hecho sin una guía este es solo un extraño juego de puzles bastante malo, quizás te des cuenta de que han aparecido mensajes crípticos en el directorio del juego, pero nada más.
Esa es mi mayor queja, junto con el hecho de que no haya mucha conexión entre el gameplay, la historia y la cuarta pared. Sin embargo la historia me parece bastante bonita. Creo que este juego gana mucho más si ves un video que explique todo sobre este (RiskRim tiene uno que lo detalla todo) en vez de jugarlo, porque además el gameplay es tedioso y algo aburrido solo para conseguir un poco de progreso o un final diferente.
Me sorprende que este juego no se hiciera más popular.
La música es muy bonita y la brujita conejo es muy mona.

Al igual que todos los juegos de Wario su humor es raro, abstracto y a la vez impecable.
También hay docenas de coleccionables extraños con los que pasar el rato.
Sin embargo, en vez de una colección de cientos de microjuegos dispone de 12 minijuegos de un jugador y 4 de varios, todos con varios niveles, y todos con un uso muy creativo del Gamepad de Wii U.
Por desgracia ninguno de los minijuegos es realmente profundo así que tampoco creo que lo rejuegue demasiado, es una colección de 16 buenos juegos pero que simplemente no tienen demasiado que exprimir más allá de 10 minutos con cada uno.

Este juego es mil veces mejor que el primer Yo-Kai Watch, y si alguien quiere iniciarse en estos juegos es mejor que empiece por aquí.
La cantidad de contenido que tiene este juego es brutal, tanto en cantidad de Yo-Kai de los que hacerte amigo como misiones secundarias y storylines, contenido opcional.
Puedes superar la historia, las misiones secundarias, e intentar conseguir todos los Yo-Kai, pero también montar en tren, participar en carreras de bicis, recorrer el camino misterioso y sus tres ramificaciones, el tunel infinito, jugar minijuegos de ritmo, completar preguntablas, encontrar y superar portales místicos... Y eso que solo me he pasado la historia y aún no he empezado el post-game, que es donde "empieza el juego de verdad". Encontré a una persona en internet con 700 horas y que todavía no había visto todo el contenido del juego.
Además la calidad de todo este contenido es impecable y está plagada de pequeños detalles, cosas como que puedes pulsar el botón del semáforo para cruzar y si no lo haces te llamarán la atención o que puedas levantar la tapa del váter de tu casa y sentarte en este hacen que el mundo se sienta pulido.
Las únicas quejas son que la historia principal no es del todo llamativa y dramática ya que es un juego para niños, y que conseguir algunos de los Yo-Kai más exclusivos puede ser aburrido, bien por necesitar un grindeo excesivo o por estar ligados a alguna acción específica como escalar un poste siete días IRL seguidos, o por requerir alguna de las otras versiones de Yo-Kai Watch.
En cuanto al humor, es infantil pero bastante ridículo y abstracto, y puede llegar a sacarte una carcajada.
Es un monster catcher del que es casi imposible aburrirse tanto por cantidad como por calidad, ya le gustaría a cualquier juego de Pokemon estar a este nivel.

Descubrí este juego cuando estaba en Alpha y aún lo sigo jugando. Cuando lo jugué por primera vez me atasqué un par de veces y dropeé el juego o usé guías, soy una persona a la que le cuesta sentarse y leer, lo que me atrajo inicialmente del juego fue la temática del espacio. Pero cuando jugué lo suficiente y presté un poco de atención me dí cuenta de que la historia que me estaban contando era, de hecho, fantástica, que las mécanicas eran impecables, el diseño magistral... y me enamoré.
Mi momento favorito, la estación solar.
Este juego y sus enseñanzas me acompañarán hasta la tumba. Y también el odio hacia ciertos peces.
A día de hoy soy speedruner del juego, conozco como está programado a la perfección y puedo glitchearlo de 30 formas distintas.
Fun fact, el juego tiene muchos glitches, solo hace buen trabajo escondiendolos. Siguiendo la filosofía del juego, son cosas que nunca pruebas porque no sabes que debes probarlas, pero realmente no son complicados de ejectuar.

Una mezcla de boomer shooter y rougelite pequeñito, una experiencia corta pero excelente. Solo hay 4 armas, 12 mejoras y 5 enemigos, pero el juego no necesita más.
Te mueves por un laberinto de estrechos pasillos que serpentean con un enemigo a la vuelta de cada esquina, el escenario entero se balancea arriba y abajo, las paredes tienen colores vivos y disparar, recibir daño o hasta moverte hace que la pantalla destellee. Todo esto crea una experiencia angustiante que culmina cuando te das cuenta que el líquido de tu ídolo, que simboliza tu barra de vida, está goteando.
Así tienes que llegar a la meta antes de que se vacíe mientras rellenas un poco del líquido matando enemigos en el menor tiempo posible mientras corres, te deslizas y rectificas en el laberinto que es el juego. Perderás, y cuando lo hagas tu castigo será otra serie de imagenes rápidamente parpadeantes.
La atmósfera psicodélica pero angustiante y violenta es perfecta, la forma en la que el juego consigue transmitirte urgencia, la cuenta atrás con coloridos números (de nuevo parpadeantes) que parecen sacados de revista, las imágenes parpadeantes, creo que nada falta y sobra.
La jugabilidad y el contenido se hacen repetitivos a las pocas horas pero el juego cuesta 3€, está diseñado para ser una experiencia corta.
Ahora van las quejas, empiezo con la accesibilidad. Como ya he dicho hay un montón de destellos e imágenes brillantes peligrosas para algunas personas, molelstas para otras. El juego tiene un "modo accesibilidad" que elimina las imágenes parpadeantes en la pantalla de muerte, pero no cambia ningún otro aspecto del juego, así que no arregla realmente nada.
La segunda queja es sobre la dificultad. Al ser un juego tan cortito y pequeño tampoco es una exigencia pero estaría bien poder bajar (¡o subir!) la dificultad, ajustando por ejemplo el daño de los enemigos y la velocidad a la que se vacía el ídolo.