Muy buen juego debut para el estudio Ember Lab. Se nota que se trata de un estudio de animación porque el juego estéticamente es hermoso y las animaciones de movimientos de los personajes, así como se comporta el entorno, son fantásticas.

Quizá, por poner algún pero, es que el diseño de los bosses a nivel jugable deja algo que desear. Aunque tendrán tiempo corregirlo en sus próximos títulos, seguro. Por el lado positivo, la historia me ha parecido buena, al nivel de una película promedio de Pixar, por ejemplo.

Me ha dejado muy buen sabor de boca en general, pese a que no he podido disfrutarlo a máxima potencia en PS5, ya que mi PC no da para tanto.

El último peldaño en el descenso a los infiernos de la saga Pro Evolution Soccer. Desde 2006, año a año, esta saga que llegó a ser la gran saga de la simulación futbolística ha ido empeorando y bajando prestaciones paso a paso hasta llegar aquí, al año 2022 en el que simplemente el juego es una especie de app que te permite jugar algunos partidos amistosos entre una escueta selección de clubes y meterte de lleno en una especie de Ultimate Team, al estilo FIFA, pero chusquero, más aún de lo que ya lo es el modo de los juegos de Electronic Arts.

La parte buena es que la parte jugable es bastante decente, dentro de los partidos el juego se comporta bastante bien y al menos tiene las caras escaneadas, las plantillas actualizadas de salida (gracias Konami) y los derechos de todos los clubes (10) que hay de momento.

Veremos a ver que van incluyendo a lo largo de los meses de vida del título, pero pinta bastante mal el asunto.

Tras jugar unas horas a la versión de prueba de EA Access tengo que decir que esta versión de Series X, así como la de PS5, puede ser el salto que necesitaba la saga tras unos cuantos años de estancamiento y deterioro acumulado. El juego se siente muy bien, la tecnología hypermotion cumple su función de maravilla y, quizá, por sacar un punto negativo, los porteros siguen siendo la pieza más débil de este ajedrez. En este título he notado que hace falta poco más que hacer un tiro potente para colársela incluso a los mejores guardametas.

De todas formas, no deja de ser la versión de prueba y, aunque EA no suela hacer cambios demasiado drásticos mediante las actualizaciones, supongo que aún hay cosas por retocar.

Todo esto está basado en partidos contra la máquina, no he jugado online y, por supuesto, el Ultimate Team no lo toco ni con un palo.

Otro juego experimental que se adentra más en la experiencia de un viaje que en la propia jugabilidad. En seguida te hará recordar otros títulos como Journey o Abzu, pero bajo mi punto de vista es una vuelta más de tuerca al concepto.

Si Journey apostaba a la importancia del compañerismo, gracias al modo online perfectamente integrado en la base de la jugabilidad, Omno recoge muy bien ese concepto pese a la dificultad de apostar por algo así en una época en la que no puedes estar seguro de que la gran mayoría del público va a disfrutarlo por los costes de las suscripciones, y te integra una IA como compañera que si bien no te va a solucionar nada en tu periplo siempre la sientes cercana y cumple su función de acompañante a la perfección.

Abzu, por otro lado, me parecía la banalización de esta idea, pero Omno no cae en sus mismos errores y mediante unos power-ups muy bien seleccionados consigue hacerse muchísimo más divertido. Y, además, transmite muchísimo mejor su mensaje de que lo importante es el camino y no el final.

En definitiva, una aventura muy recomendable aunque es importante tener en cuenta que apenas llega a las dos horas. Si, por lo que sea, te queda lejos el Camino de Santiago, aquí tienes una buena experiencia peregrina.

PD: El engendro verde que te acompaña es la cosa más ridículamente mona que he visto en mi vida.

Posiblemente el mejor juego de colección de criaturas y batallar con ellas del estilo Pokemon que ha salido desde Heartgold y Soulsiver. Modo de combate refrescante comparado a los de la saga de Nintendo, historia realmente interesante y accesible para todos los públicos y personajes profundos, en todo le da bastantes vueltas a la mayoría de juegos de Pokemon que se han lanzado desde la 4ta generación.

Si te gusta este género, este título es muy recomendable. Y, en menor medida, también lo es el Nexomon: Extinction, que no llega al nivel de este Temtem pero si está por encima, también, de los últimos títulos de la saga nintendera.

En el día que escribo esta review ni siquiera está terminado y estoy con muchas ganas de ver como acaba siendo Temtem con la 1.0 y posteriores actualizaciones. Un juego y saga con muchísimo futuro.

Me he tomado con calma este juego porque desde el principio ponen todo tipo de trabas al disfrute del jugador. Para poder jugar a los niveles de otros usuarios has de completar un tutorial absurdamente largo, aunque no te interese crear nada. Este es el primer punto negativo.

El segundo sería que como herramienta de construcción se ve realmente limitado. Los juegos acaban siendo poco más que niveles de títulos de móvil y todo bañado en un diseño muy farragoso que te quita bastante las ganas de insistir.

Por el precio recortado al que ha salido valía la pena el riesgo, aunque no puedo recomendar la compra. Al menos de momento. La idea es muy buena, pero la ejecución es demasiado Nintendo.

Una oda al mundo de los videojuegos. Repasa muchos géneros, contiene muchísimas referencias a títulos históricos y, también, a muchísimas películas de la cultura geek. Una experiencia muy disfrutable desde el punto de vista artístico.

En cuanto al punto de vista jugable, tiene muchas mecánicas puesto que encuentras fases que son un beat em up al más puto estilo Street of Rage hasta otras más pausadas del corte de Fire Emblem o Final Fantasy, que es muy interesante pero, debido a la brevedad de estas pantallas, no profundiza demasiado y termina siendo una referencia más que desde el punto de vista puramente jugable no son demasiado interesantes e incluso se hacen un poco tediosas en ocasiones. En líneas generales, fuera de estas fases referenciales, el juego es muy del corte The Legend of Zelda.

En definitiva, un juego interesante y recomendable si eres un gran seguidor de la cultura del videojuego, pero al que no recomendaría acercarse por temas jugables o narrativos. Aunque la historia cierra bien y es agradable de seguir.

Propuesta interesante de juego de aventura y puzzles, aunque me ha parecido muy simplón en todas sus mecánicas. Los puzzles son muy sencillitos, hay mecánicas del automóvil que se explotan muy poco como la aspiradora o los garpones (sobre todo el trasero), la historia es muy difusa hasta el punto de que cueste creer si realmente está tratando de contar algo.

Aun con todo, es un juego relajante, visualmente muy coqueto y original. Podría recomendarlo a algunas personas, pero no me parece para nada un título del que pueda o deba disfrutar todo el mundo.

No suelo dejar juegos a medias, pero en este me he visto, básicamente, obligado. En la misión del boss Siege Mech se me ha debido buguear y no puedo completarla de ninguna forma. He estado cerca de una hora dando vueltas y no hay manera.

Hasta ese punto, el juego tampoco me estaba pareciendo nada de otro mundo. Muy buena ambientación cyberpunk, que es el punto más fuerte del juego. En cuanto a las cosas a mejorar están el sistema de combate, que al menos con mando es muy trambólico, y la historia deja mucho a desear, siendo bastante olvidable.

De momento no le voy a dar más oportunidades. Quizá en el futuro si sacan actualizaciones grandes y noto que el título merece la pena, vuelva a probar. Pero me parece totalmente olvidable.

Juegazo atrapante y con unas mecánicas y una jugabilidad perfectamente medidas. Nunca he querido bajar la velocidad de los discos del 100% porque el reto es muy satisfactorio al ir completando sala a sala todos los retos en la dificultad estipulada.

Lo he terminado con un 82% del juego completado y voy a intentar buscar ese 100% con los (pocos) discos y salas que me quedan, aunque tiene pinta de que será un quebradero de cabeza hacerlo. Y al terminar "la historia" te desbloquea el modo difícil del mapa que me parece destinado a auténticos psicópatas.