El gustito que da terminarse esto me hace entender por qué la dificultad en estos juegos es tan importante, más cuando en Sekiro, al contrario de las quejas que pudiera haber sobre los controles en Dark Souls, se controla finísimo y con una precisión de ninja. I get it, no todo el mundo quiere jugar a algo así, yo tampoco la mayor parte del tiempo, pero cuando se unen las estrellas, tengo tiempo, ganas y me siento inspirado quiero jugar a algo como esto y sentirme en ninja warrior máximo.

Tiene una buena mecánica solamente, ¡pero es muy buena! Que es la de reflejar disparos con la katana. Lo que pasa con este juego es que naturalmente le vas a pedir que sea un Hotline Miami que es lo que le pega ser pero el juego pone su foco en la narrativa por alguna razón. Hay poquitos niveles y no experimentan mucho con las mecánicas para que el concepto no se sienta estancado para el final.

Metroidvania simpatiquísimo y cortito que se puede pasar casi en una sentada si te pones. Tiene buen sentido del humor, estética preciosa, y la gatita protagonista es muy cuqui.

Buen ejemplo de diseño de niveles procedural que sale mal. El juego escala dificultad de forma ridícula de un nivel para otro, el sistema de progresión es errático, y el momento a momento está lleno de situaciones frustrantes por culpa de una aleatoriedad poco contenida: pathing de niveles diseñados regular, elementos dispuestos con mucho riesgo pero poca recompensa, etc... SI todo esto no fuera suficiente, la mecánica de rellenar gasolina tiene un rol tan protagonista que a menudo no querrás ni podrás enfocarte a otra cosa en los niveles.
Tenía muchas ganas de este juego cuando lo vi pero fue una gran decepción.

¡Está bien! Vive demasiado de las rentas como para haberme hecho sentir algo especial a nivel jugable y sus influencias son tan obvias y ocupan tanto sitio en horas de juego que me ha costado vivirlo como una experiencia Star Wars pura y dura.
No se lo recomendaría a nadie, quizás solo al fan acérrimo que lleva años consumiendo cualquier cosa mediocre por el simple hecho de ser SW y esto, que está, de nuevo, Bien, puede subir hasta a una experiencia notable.

Uno de los mejores juegos "¡Eureka!" que he jugado. Se siente como trabajo detectivesco real, tomando notas, haciendo tablas, uniendo nombres... La fisicalidad con la que interactuas con ciertos elementos te hacen estar aún más presentes en ese mundo con esa estética perfecta.

Este juego me hizo descubrir a Alan Watts. Así que le estaré eternamente agradecido

Jugar en su día a esto con el WiiMote como un volante era algo extraordinario. Quizás este recuerdo está romantizado por como lo asocio a veladas con familiares y amigos, pero creo que ningún otro Mario Kart ha tenido ese impacto en mi vida.

Disfrutón, pero también me tuvo todo el tiempo dando vueltas a la idea de que yo a los juegos de Naughty Dog ya no puedo dejar de pedirles ese nivel de innovación, audacia y redondez que han dado con sus últimos grandes títulos.
Ver una de sus entregas en este formato spin-off que trata de contentar a todos pero sin querer en ningún momento alzarse muy alto me ha tenido todo el tiempo en un estado de zona de confort que a mí al menos no me aporta nada. Ni siquiera me atrevería a recomendarlo sin recomendar antes la saga principal, porque sus mejores momentos se han hecho mejor en otras entregas.
De nuevo, es un buen juego, y te vas a quedar con buen cuerpo al terminarlo. Es definitivamente superior a algo como Golden Abyss... Pero es que veníamos de Uncharted 4.

Sin estar a la altura de su anterior entrega, sigue siendo un blockbuster irresistible y quizás el que mejor fluye de principio a fin de toda la saga, pasados eso sí ese comienzo tan torpón en los túneles de Londres.

Creo que uno de los mejores DLC que he jugado nunca. Completamente opcional, pero añade capas jugables y agumentales al primer TLOU que suman puntos a una aventura ya de por sí excelente.

Aunque el primer TLOU ya me pareció que retrataba a una Ellie tridimensional e interesante de cara a ser una futura protagonista, para los más dudosos, esto sin duda termina de redondear al personaje.

Este juego ha tardado en calar en mí. Una parte de mí odiaba al principio que Druckmann hubiese querido Druckmannizar Uncharted. Demasiadas cosas me recordaban a la forma de abordar la narrativa en TLOU y el gameplay de repente tenía espacios más amplios, introducía el sigilo de forma más completa, con enemigos con una IA con patrones y ciclos más complejos....

Sucesivas partidas a este juego me han hecho ver como estas quejas que yo tenía son, al final, parte del proceso iterativo de Naughty Dog, y como Uncharted 4, por mucho que bebe de TLOU, es indudablemente un Uncharted. Un Uncharted diferente, sí, pero sin duda uno mucho más valiente e interesante del continuismo que en su día propuso Uncharted 3.

Cuesta recomendar actualmente un juego que es de forma tan obvia inferior a sus continuaciones. Pero la mayoría de los elementos que hace a esta saga tan disfrutable están aquí, estando como siempre en el centro un trabajo de personajes impecable.

Un blockbuster gourmet como pocos. Íntimo y visceral. Sabe coger sus referentes y son identificables pero los aplica a un conjunto con cuerpo propio de forma que solo se siente como a sí mismo. La filigrana del plano secuencia termina de dar al conjunto una cohesión impecable.

Es raro porque Mario es una fórmula muy concreta, y que algo como esto exista, donde los usuarios crean cosas como cirtuitos de Mario Kart en scroll 2D, me entusiasma a la vez que me rechina a la hora de ponerme a jugarlo. Puedo pasarme horas jugando a cosas mediocres y pensar.... "para esto me juego a un Mario normal", aunque de vez en cuanto te encuentras con algo realmente bueno.

Como concepto de juego de crear y compartir, me parece el juego más puro es este formato desde el primer Little Big Planet. No intenta nada más que ser un espacio simpático y divertido para fans.